Saltar al contenido

TRASTORNO DE ALIMENTACIÓN


Cuando nos referimos a estos trastornos estamos acostumbrados a hablar de bulimia y anorexia, dos cuadros graves sin duda que cada día lo sufren más personas. Si embargo la mayoría presenta otros cuadros que no por ser más leves o difundidos hay que pasarlos por alto.
Me refiero a aquellas personas para las cuales el peso es una obsesión y las dietas un recurso mal empleado.
Comienzo el lunes, significa que ese día nos pondremos bajo el rigor de nuestro yo censurador (Superyo) que nos vigilará severamente y castigará por medio de la culpa cuando transgredimos.
¿Y por qué transgredimos? Porque la prohibición aumenta el deseo. Dentro nuestro se establece una lucha entre DESEO y DEBER.
¿Cómo se adelgaza sin prohibiciones?
Cambiando de a poco los hábitos alimenticios. El nutricionista es un educador de cómo llevar una sana alimentación. Por eso cuando los padres no quieren llevar al higo (excedido en peso) a un nutricionista porque creen que es ponerlo a dieta. Yo les recomiendo que vayan lo antes posible. El profesional modificará hábitos del niño y de la familia. Es el momento más adecuado para cambiar.
Extendiendo esto a jóvenes y adolescentes, diremos que no hay nada peor para reforzar un trastorno de alimentación, que negar la preocupación por el peso y negarle a la persona la posibilidad de hacerse de recursos para controlar su alimentación y peso.
Los grandes trastornos «Anorexia» «Bulimia» y ahora «Diabulimia» son patologías que tienen un determinado sustrato de personalidad. Se los considera dentro del espectro obsesivo, y estas conductas serían compulsivas. Pero el resto de las personas que no padecen estas patologías, pueden padecer un trastorno de alimentación que va de la inestabilidad del peso, las dietas continuas, la baja autoestima, la fobia social, etc.
Hay muchos cuadros psiquiátricos que cursan con alteraciones en la alimentación. Por cierto que en todos ellos es fundamental el tratamiento psicológico. Pero también es cierto que una gran ayuda es escuchar esta preocupación y consultar a un nutricionista para que enseñe la manera correcta de alimentarse.

Anorexia
La anorexia se caracteriza por el temor a aumentar de peso, y por una percepción distorsionada y delirante del propio cuerpo que hace que el enfermo se vea gordo aun cuando su peso se encuentra por debajo de lo recomendado. Por ello inicia una disminución progresiva del peso mediante ayunos y la reducción de la ingesta de alimentos.
Como se cree que los hidratos engordan es lo primero que se elimina de la dieta, luego rechazan las grasas, las proteínas. A estas medidas drásticas se le pueden sumar otras conductas asociadas como la utilización de diuréticos, laxantes, purgas, vómitos provocados o exceso de ejercicio físico. Las personas afectadas pueden perder desde un 15 a un 50 por ciento, en los casos más críticos, de su peso corporal. Esta enfermedad suele asociarse con alteraciones psicológicas graves que provocan cambios de comportamiento, de la conducta emocional y una estigmatización del cuerpo.
Los problemas endocrinos se hacen evidentes en un espacio de tiempo relativamente corto. Los principales síntomas que determinan la aparición de la enfermedad son los siguientes:
• Rechazo a mantener el peso corporal por encima del mínimo adecuado para la edad y talla del enfermo.
• Miedo al aumento de peso o a la obesidad incluso cuando el peso se encuentra por debajo de lo recomendable.
• Percepción distorsionada del cuerpo, su peso y proporciones.
• Ausencia de tres ciclos menstruales consecutivos. Los anoréxicos pueden experimentar una serie de síntomas muy variados: estreñimiento dolor abdominal, vómitos, etc.
Pero es la familia la que detecta los síntomas que dan la voz de alarma:
• Reducción progresiva de los alimentos
• Preocupación excesiva por la composición calórica de los alimentos y por la preparación de los alimentos
• Obsesión por la imagen, la báscula, los estudios y el deporte
• Utilización de trampas para evitar la comida
• Hiperactividad
• Constante sensación de frío
• Alteración de la sensación de saciedad
• Náuseas
• Hinchazón

A nivel cognitivo hay distorsiones en la formulación de sus pensamientos
• Generalizaciones
• Ideas autorreferenciales.
• Inferencia arbitraria
• Supersticiones.
• Se magnifica el lado negativo de cualquier situación.
• Pensamiento dicotómico.
• Abstracciones selectivas
• Uso selectivo de la información.
BULIMIA
La persona ingiere poco durante el día y sufre atracones compulsivos, seguido de sentimiento de culpa, y angustia.
Hay conductas compensatorias para perder peso como vomitar, purgarse, por lo que es común el uso de laxantes y diuréticos, como también el ejercicio físico intenso.
Tipos de bulimia
• Purgativo: cuando la conducta compensatoria es el vomitar, los laxantes o diuréticos.
• No purgativo: Ejercicio físico intenso.
Personalidad de la bulimia
Son inseguros , tienen baja autoestima y ésta está en realción directa con el peso corporal.
Por lo general provienen de familias disfuncionales, incluso muchas de ellas son analfabetas emocionales que no saben diferenciar ni plantear emociones. Todo lo reducen a una cuestión de peso.

Efectos secundarios
• Desmayos muy frecuentes, mareos.
• Heridas de la mucosa bucal.
• Aumento en la frecuencia de caries dentales.
• Aumento del tamaño de las glándulas salivales e infección de estas.
• Alteración o pérdida esmalte dental.
• Dolores de cabeza y migraña.
• Dolores en la garganta (después de vomitar).
• Piel seca
• Debilidad en las piernas.
• Disfonía
• Pérdida de cabello
• Alteraciones menstruales
• Rotura esofágica
• Neumotórax
• Bajos niveles potasio
• Arritmia cardíaca
• Incremento y reducción bruscos de peso, desestabilidad en el peso.
Tratamiento
El tratamiento debe realizarse en lugares especializados ya que el tratamiento debe ser integral incluyendo por cierto la familia. Ayuda el formar parte de grupos de personas con el mismo padecimiento. A nivel medicamentoso se trata con antidepresivos a altas dosis por su efecto anti obsesivo.
DIABULIMIA
La diabulimia es un trastorno de alimentación similar a la bulimia que afecta a muchas adolescentes con diabetes tipo I, una enfermedad cuyo control depende en gran medida de inyectarse insulina.
El Colegio Americano de Endocrinología, ha lanzado una campaña en la que alerta sobre los peligros que entraña la restricción voluntaria de la insulina.
“La diabulimia es un trastorno que vemos en la consulta con adolescentes mujeres con diabetes tipo I, que tienen la misma obsesión por el peso que pueden tener las no diabéticas”, dijo a La Nación la doctora Carmen Mazza, consultora del Servicio de Nutrición del hospital Garrahan.
“Si bien el cuadro es muy parecido a la bulimia de la mujer no diabética, adquiere una gravedad tremendamente importante, porque las pacientes van entre la hipoglucemia, con grandes fluctuaciones de su peso. Incluso puede llegar a causar la muerte”, agregó Litwak, jefe de la Sección Diabetes y Metabolismo del Hospital Italiano.
Trastornos de la menstruación, caída del pelo y un menor crecimiento son algunos de los efectos a corto y mediano plazo de la diabulimia.