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ACOSO

Cada día son más los casos de hostigamiento moral y psicológico en oficinas públicas y empresas privadas. Hay abuso de poder y las víctimas enferman de depresión, que en casos extremos puede llegar al suicidio , además de la pérdida del empleo.
Se trata de acciones cometidas contra un trabajador durante un tiempo prolongado, que afectan su dignidad como persona.

El acoso empieza de forma sutil. El acosador desvaloriza a su víctima,  le exige una determinada respuesta, que el otro no le puede dar. Luego, su perversidad va en aumento. Al final del proceso, que puede durar dos o tres años, la persona afectada tiene totalmente destruida la autoestima.
Este fenómeno a nivel mundial se lo llama «mobbing», que significa «ataque, atropello».
SIGNOS PARA IDENTIFICARLO :
– el acosador «le asigna a la víctima tareas inútiles, absurdas, peligrosas y humillantes;
– no le permite comunicarse;
– la interrumpe continuamente cuando habla;
– le critica su trabajo;
– se burla de su vida privada;
– le niega el contacto mediante gestos de menosprecio;
– ignora su presencia;
– la aísla de sus compañeros;
– le grita, la amenaza, la injuria; le atribuye una enfermedad mental

Es más común de lo que uno cree y no hay más denuncias porque todavía existe el miedo a perder el trabajo. A veces, los compañeros de la persona afectada prefieren no meterse, para no ser considerados delatores.
Como se trata de una situación difícil de probar, es clave la participación de testigos, cuya protección y responsabilidad es hoy materia de debate en el Congreso
Afortunadamente la gente está empezando a visualizar el problema como una agresión a sus derechos y cada día llegan más denuncias.
En la Argentina funciona la Oficina de Atención a la Víctima de la Violencia Laboral, en la Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas, que es un organismo de control del Estado.

En el ámbito privado, la forma eficaz para producir el cese de la violencia y la protección psicológica del damnificado es el recurso de amparo, también se utiliza la mediación por carta documento.

El acosador por lo general tiene una personalidad psicopática sin sentido moral y ausencia de culpabilidad.
Suelen ser personas con complejo de inferioridad , competitivas mediocres que actúan motivados por la envidia –
Según expertos del Estado, el acoso no siempre es ejercido por un jefe despótico contra un subordinado, sino que puede darse también entre compañeros de trabajo.

Teléfonos útiles

La Oficina de Atención a Víctimas de Violencia Laboral atiende de 10 a 15 en Perón 2455, tercer piso, Capital.

Tel.: 4959-5942/5943.

Comisión Tripartita del Ministerio de Trabajo.
Tel.: 4310-5678/5525/5874