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ABUSO SEXUAL

El aberrante hecho deja secuelas y es más frecuente de lo que se cree: en el nivel mundial, en una de cada cinco familias, aproximadamente, un chico transita alguna situación de abuso, ya sea físico, emocional o sexual.

Las víctimas de abuso pueden ser varones o mujeres de distintas edades y clases sociales, aunque, según afirma Diner, es mayor el porcentaje de varones maltratados físicamente y de niñas abusadas sexualmente. En cualquier caso, las cuestiones por combatir son los engaños y sobornos por parte de abusadores, y su contrapartida: la culpa y el miedo en los niños.

Según las estadísticas a nivel mundial
1 de cada 5 chicos.
En el 95 % es un hombre
El 85 % es un pariente o amigo de la familia.
El 50% es el padre biológico
El otro 50% son tíos, abuelos, primos o hermanos mayores..

«En países desarrollados, como los Estados Unidos, el tema se habla en los colegios y el Estado interviene en los planes preventivos -afirma la especialista, que es docente responsable del curso para graduados «Abuso infantil y prevención», en la UBA-. En nuestro país, es necesario crear centros de información y atención psicológica, médica y legal que lleguen a todos, centros de capacitación para docentes, campañas masivas, programas para padres sobre el cuidado de la salud de sus hijos, etc.»
Es importante que los adultos puedan reconocer algunos signos de alarma: si un chico está siendo sometido a abuso, puede presentar cambios en la conducta (inhibición, agresividad), trastornos del sueño y la alimentación, migraña, enuresis, problemas de aprendizaje y cambios en la sexualidad: extrema inhibición (rechazo a cualquier contacto habitual) o erotización prematura. A esto se agregan indicios más obvios: golpes, lastimaduras, u otras lesiones físicas.

SIGNOS DE ABUSO EN UN NIÑO
Terror a algunas personas o a algunos lugares. Retirarse, tener fantasías o comportamiento como si fuera bebé, no querer participar en deportes. Respuestas ilógicas del niño si se le pregunta acerca de alguna herida en sus genitales. Decir haber sido víctima de ataque sexual. Ostentar frecuentemente actividades sexuales sugestivas o promiscuas. Temor irracional ante un examen físico. Dibujos tétricos o con exceso de rojo y negro. Cambios súbitos de conducta de cualquier clase. Cometer actos de delincuencia o escape. Conciencia repentina de sus genitales, o palabras o actos sexuales. Tratar de que otros niños lleven a cabo actos sexuales.

En esos casos, conviene consultar de inmediato para obtener un diagnóstico diferencial. «Pero siempre hay que tener en cuenta que la prevención primaria no sólo genera menos costos para el sistema , sino -básicamente-, evita el sufrimiento humano».

Hay que diferenciar el violador del que abusa . Este por lo general lo hace desde el afecto. Trata de ganarse el cariño del niño y eso es lo que produce mayor confusión. El niño se siente ganado desde el afecto, y es ahí donde muchas veces protege al abusador porque lo quiere.
Además es posible que el mismo abusador no crea que está haciendo algo malo.  Puede que él lo viva como una picardía, o una trasgresión , que si bien hay que ocultar, no provoca mal alguno. Porque considera que el afecto de alguna manera es auténtico y basta para compensar el tema de la sexualidad.

Repasemos en principio algunas creencias populares, puesto que los mitos muchas veces nos impiden reconocer la verdad.

Contra las creencias populares

  • Mito
    Las víctimas de abuso sexual suelen ser preadolescentes.
    Sólo los niños con problemas (un poco lentos o muy ingenuos) son víctimas de abuso sexual.
    La mayoría de las víctimas es de clase baja.
    Los niños pequeños corren más riesgo de ser abusados por un extraño.
    La mayoría de los abusadores son homosexuales.
    El típico abusador es un hombre viejo, sucio, que engaña al niño en una plaza
    El abuso sexual de niños siempre es un acto violento
  • Verdad
    Casi el 15% es menor de 5 años. El 60% tiene entre 10 y 18
    Estos ni ños tienen más riesgo, pero la mayoría presenta una inteligencia normal
    Pueden ser de cualquier clase, raza o religi ón
    La mayor ía de los abusadores son conocidos por los chicos, muchos de ellos, parientE.
    El 80% de los abusadores son hombres heterosexuales
    Edad promedio del abusador: 30 a ños. El abuso puede suceder en la propia casa del niño
    El que abusa suele utilizar más la seducción que la fuerza


CÓMO PREVENIR UN ABUSO

Revisar que la escuela del niño cuente con programas de prevención de abuso sexual infantil para maestros y alumnos. Si no lo tiene, comience uno. Hable con su hijo acerca del abuso sexual. El mejor momento de hacerlo es ahora. Enséñele a su niño la privacidad de las partes del cuerpo. Enséñele a identificar las partes íntimas Escuche a su hijo cuando trate de decirle algo, especialmente cuando parece difícil para él hablar de ello. Asegurarle que le van a creer cuando cuente algo Déle a su hijo suficiente de su tiempo, para que no busque atención especial entre otros adultos. Infórmese de con quienes pasa tiempo su hijo. No permita que su hijo esté «perdiendo el tiempo» con otros adultos u otros niños. Enseñarle a decir “NO”. Cuando se lo corrige , jamás apelar a lo físico. Informe a alguna autoridad si sospecha que su niño o algún otro menor está siendo víctima de abuso.